Qué es el drenaje linfático y para qué sirve

Diferencias entre drenaje linfático manual y con máquina

Dentro de la fisioterapia, el drenaje linfático manual (DLM) es un tipo de tratamiento no invasivo que se realiza, sobre todo, de forma manual, aunque también podemos encontrar aparatología específica, como la presoterapia, que sirve para emular el trabajo de un profesional.

La presoterapia es una máquina que utiliza cambios de presión para conseguir un efecto masaje, beneficiando así la circulación sanguínea y linfática. Se suele utilizar con fines más estéticos que sanitarios.

Por tanto, la principal diferencia es que el drenaje linfático manual, como su propio nombre indica, lo realiza un fisioterapeuta, mientras que la presoterapia es a través de una máquina, introduciendo partes del cuerpo en un traje neumático.

Desde un punto de vista sanitario y valorando el efecto y el éxito del método, un profesional siempre podrá focalizarse en determinadas zonas si identifica una mayor afección, adaptando el tratamiento en función de los resultados. En cambio, en la presoterapia los cambios de presión en las botas o manguitos neumáticos son de tipo continuo, lo que impide la adaptación o personalización del servicio.

Aunque son técnicas complementarias, se puede afirmar que un drenaje linfático manual realizado por un fisioterapeuta especializado siempre será más efectivo y seguro que uno realizado con máquina. Este tipo de tratamiento es el que realizamos en nuestra clínica de fisioterapia especializada en drenaje linfático manual.

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Efectos del drenaje linfático manual

    • Efecto drenante: Es el principal efecto del DLM, ya que activa la circulación y de este modo se reduce la inflamación al ser evacuado el exceso de linfa.
    • Efecto relajante: Se produce una activación del sistema parasimpático, provocando un efecto relajante tanto para al paciente como para el terapeuta.
    • Efecto analgésico: El drenaje linfático manual es un tipo de técnica indolora que se realiza con movimientos muy suaves, lo que produce un efecto analgésico debido a la estimulación de los mecanorreceptores que tenemos en la piel. Al mismo tiempo, al conseguir un efecto drenante, estamos provocando una liberación en el tejido que también produce analgesia.
    • Efecto defensivo-inmunitario: El sistema linfático forma parte del sistema inmunitario. La linfa está formada por glóbulos blancos (los linfocitos son las células encargadas de defendernos de las infecciones) y líquido compuesto de proteínas y grasas. Los ganglios linfáticos, repartidos por todo el cuerpo, producen células inmunitarias y filtran el líquido linfático.
    • Efectos en el embarazo: Ayudamos a las embarazadas a sentirse menos pesadas, sobre todo a nivel de miembros inferiores en las últimas etapas del embarazo. Aunque es preciso realizar una valoración previa, también puede ser beneficioso para la madre recibir drenaje linfático manual en las mamas en caso de mastitis.
    • Además, tiene efectos sobre el estreñimiento (regula el peristaltismo) y mejora la calidad de la piel.

Quien hace este tipo de tratamiento

El drenaje linfático manual debe ser realizado por un fisioterapeuta titulado, como por ejemplo en nuestra clínica de drenaje linfático en Madrid. Esto se debe a que, aunque la gran mayoría de pacientes pueden realizarse un DLM, también existen contraindicaciones (las explicamos al final del artículo) que deben ser valoradas por un profesional sanitario. 

Es un servicio muy útil después de lesiones que provocan inflamación, como los esguinces de tobillo, o tras ciertas intervenciones quirúrgicas, ya sean oncológicas, estéticas o ortopédico-traumatológicas.

El DLM es muy demandado por mujeres, ya que suelen sufrir de mayor pesadez o cansancio de piernas, en general, y durante el embarazo, en particular. 

En hombres y mujeres que sufren linfedemas y lipedemas, problemas circulatorios, en procesos digestivos como el estreñimiento, y en las mastitis, siempre que no haya fiebre.

Qué tipos de drenaje linfático existen

  • DLM en cuello: Siempre es la primera zona que debemos de tratar, independientemente de lo que vayamos a hacer después. Debemos de tener cuidado en pacientes con hipertiroidismo.
  • DLM en miembro superior: Es el más utilizado después del cáncer de mama, ya que el brazo se inflama si se extirpan las cadenas o ganglios axilares. Va desde el cuello hasta los dedos de las manos.
  • DLM en miembro inferior: Se podría decir que es el más solicitado. Al igual que en el caso del miembro superior, se drena toda la pierna, desde la ingle hasta los dedos de los pies.
  • DLM en abdomen: La zona del abdomen es una zona que siempre se debe tratar por su importancia anotómica respecto del cuerpo.
  • DLM post-liposucción: Para evitar fibrosis y ayudar en la reabsorción del hematoma.
  • DLM en embarazadas: Para aliviar pesadez, contra retención de líquidos o problemas circulatorios. Se pueden realizar sin problemas, no hay una contraindicación específica, aunque el fisioterapeuta valorará cada caso desde un punto de vista sanitario.

Contraindicaciones del drenaje linfático manual

  • Procesos infecciosos o si se están tomando antibióticos.
  • Hipo o hipertensión severa.
  • Problemas cardiacos: infarto de miocardio, angina de pecho, edema por insuficiencia
  • cardiaca descompensada.
  • Procesos tumorales.
  • Alteraciones de la piel: Tipo celulitis gangrenosa bacteriémica, úlceras, infecciones o enfermedades de la propia dermis (piel).
  • Flebitis, trombosis, tromboflebitis.
  • Ante cualquier duda, siempre debemos de consultar al especialista y/o fisioterapeuta.

ÁNGELA VÍRSEDA GARCÍA

Fisioterapeuta colegiada Nº 8527 por el Ilustre Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid y Osteópata por la FBEO.