Dolor en el hombro al levantar el brazo: causas y soluciones
El hombro es la articulación con mayor rango articular de todo el cuerpo. Como sucede con todas las estructuras, a mayor movilidad, mayor posibilidad de sufrir problemas. En el hombro, los problemas se presentan en forma de molestias y lesiones.
Anatomía básica del hombro
En la articulación glenohumeral, presente en el hombro, los huesos no se encuentran tan encajados los unos a los otros como en otras partes del cuerpo, dependiendo su sujeción, sobre todo, de tendones y ligamentos. Esto le otorga a esta articulación mayor libertad de movimiento. Por el contrario, también lo hace más inestable.
Causas más comunes que pueden causar dolor de hombro al levantar el brazo
Existen diferentes tipos de lesiones en el hombro que impiden o limitan la movilidad del brazo. Entre las más graves, se encuentran la fractura y la dislocación, generalmente ocasionadas por algún tipo de impacto.
Sin embargo, también podemos tener dificultades y sentir mucho dolor al levantar el brazo sin ser capaces de identificar una causa directa. En estos casos, lo más habitual es que su origen provenga de movimientos repetitivos, malas posturas, sobreúso, envejecimiento, enfermedades degenerativas o por un movimiento abrupto.
Síntomas y señales de alerta
Los seres humanos, sobre todo en las últimas décadas, con la proliferación de los ordenadores y teléfonos móviles, suelen tener una posición adelantada de cabeza y hombros. Cuando los utilizamos sin adoptar una postura correcta, el hombro tiende a realizar una rotación interna y antepulsión de la escápula, generando, con el paso del tiempo, una tendinopatía en el supraespinoso, lo que provoca dolor, inflamación y limitación al movimiento.
Esto también puede ocurrir en personas que realizan mucha actividad física o que tienen trabajos que demandan de gestos repetitivos de elevación del brazo por encima de los 90 grados.
Diagnóstico
Además de las fracturas y dislocaciones, las lesiones más habituales que nos impiden levantar el hombro son las siguientes:
- Desgarros: ya sean agudos o crónicos. Es muy habitual sufrir desgarros en el manguito rotador.
- Capsulitis adhesiva: también conocido como hombro congelado, debido a la aparición de adherencias, producidas, generalmente, por la falta de movilidad.
- Bursitis: debido a impactos o movimientos repetitivos.
- Tendinitis: inflamación debido a un sobre esfuerzo, sobreúso, posturas forzadas, etc.
- Osteoartritis: es una enfermedad degenerativa que causa dolor y limita la movilidad de las articulaciones.
Tratamiento fisioterapéutico
Se recomienda realizar sesiones de fisioterapia con terapia manual para disminuir la tensión muscular del manguito de los rotadores, trapecios, pectoral y demás musculatura implicada en el hombro.
Además, para regenerar los tejidos y disminuir tanto la inflamación, como el periodo de recuperación, se suele emplear la radiofrecuencia Indiba, muy eficaz, o la punción seca en musculatura con puntos gatillo. Para ganar movilidad articular, lo ideal es hacerlo tanto de forma pasiva, como activamente, mediante ejercicios pautados.
La mejoría de una patología de hombro suele ser lenta y conlleva varias sesiones de fisioterapia y rehabilitación. El proceso es diferente en cada paciente. Antes de iniciar el proceso de recuperación, el fisioterapeuta deberá realizar una valoración inicial para determinar el mejor tratamiento a seguir, realizando las modificaciones que sean necesarias conforme a la evolución de cada lesión.
Otras terapias y recomendaciones
Si con las sesiones de fisioterapia no fuese suficiente, y el paciente persiste con dolor, se pueden inyectar corticoides, que es la técnica comúnmente conocida como “infiltración”. No todos los pacientes suelen tener la misma mejoría tras la inyección de corticoides y en muchas ocasiones es necesario realizarla varias veces.
Solo en daños donde exista una rotura parcial o total de tendones, un desgarro en la articulación del hombro o en aquellos donde se haya probado diferentes tratamientos sin éxito, se recomienda recurrir a la cirugía.
Consejos de prevención
Realizar ejercicios de forma habitual, ya sea como calentamiento previo a actividades más demandantes, o simplemente para ganar movilidad, es uno de los métodos más eficaces para evitar lesiones en los hombros.
Los ejercicios más eficaces son:
- Rotación hacía detrás de los hombros, como haciendo círculos con los hombros hacia detrás, juntando las escápulas.
- Estiramientos de pectoral mayor y menor, llevando los hombros hacia delante y hacia dentro.
- Ejercicios con bandas elásticas o poleas: para trabajar toda la musculatura de espalda, incidiendo en rotadores externos de hombro y la musculatura interescapular (romboides, trapecios, infraespinoso).
Preguntas frecuentes (FAQ)
¿Cuándo debo acudir al médico si tengo dolor de hombro al levantar el brazo?
Si se trata de una lesión provocada por un accidente y no podemos levantar el brazo, debemos acudir a urgencias inmediatamente. Si se trata de una molestia o un daño del que nos resulta difícil definir su origen con precisión, visitaremos al especialista si el dolor no remite en unos días.
No es habitual que las personas no puedan levantar ni mover el brazo a menos que sufran una patología importante, por lo que debemos dejar de normalizar situaciones así y ponernos en manos de profesionales sanitarios.
¿Puedo seguir practicando deporte con dolor en el hombro?
De ningún modo, ya que podemos agravar o cronificar la patología, e incluso llegar a provocar lesiones o molestias en otras partes del cuerpo. Pararemos hasta que el dolor remita. Si no lo hace, visitaremos a un profesional sanitario.
Existen excepciones entre deportistas de élite, monitorizados continuamente por grandes equipos médicos, que recurren a infiltraciones puntuales u otros tratamientos de choque que les permiten participar en actividades, pero que no son extrapolables al resto de la población.
¿Los ejercicios con pesas empeoran el dolor de hombro?
No existe una causa efecto, sin embargo, pueden llegar a ser tanto beneficiosos como perjudiciales.
El entrenamiento de fuerza es una de las mejores medidas preventivas para evitar lesiones, ya que refuerza la musculatura del hombro y mejora su estabilidad. No obstante, también pueden ser foco de lesiones si los ejercicios no se realizan correctamente, especialmente los tras nuca, que desde aquí desaconsejamos.
Debemos estudiar cómo realizar los ejercicios de forma que no sufran las articulaciones antes de iniciarlos. Por supuesto, si percibimos dolor, no debemos realizar el ejercicio bajo ningún concepto.
¿La fisioterapia realmente puede evitar una cirugía de hombro?
Rotundamente sí. Pero no solo la fisioterapia, sino la combinación de esta con ejercicios de rehabilitación y la implantación de medidas correctivas y preventivas en el día a día, como cambios posturales o reducir la frecuencia de movimientos repetitivos dañinos.
La cirugía siempre debería ser la última opción, salvo en los casos más graves.
¿Cuál es el tiempo de recuperación habitual?
No es posible determinar un tiempo de recuperación o mejoría, ya que cada lesión es única. El mismo tratamiento para una misma lesión presentará, con total seguridad, un resultado y un periodo de recuperación diferentes en cada paciente.
Fuentes de referencia
https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/003171.html
https://www.clinicacemtro.com/traumatologia/unidad-de-hombro/anatomia-biomecanica-hombro/
Fisioterapeuta colegiada Nº 9005 por el Ilustre Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid. Fisioterapeuta por la Universidad CEU Cardenal Herrera y Osteópata por la Universidad de Alcalá UAH.
