Tanto la osteopatía como la fisioterapia comparten el enfoque de aliviar el dolor y mejorar la movilidad de las personas, aunque existen grandes diferencias que es importante conocer antes de decidir a qué profesional acudir.
A continuación, describiremos las dos disciplinas, expondremos sus características distintivas e identificaremos sus posibles puntos de encuentro, analizando cómo pueden complementarse para el tratamiento de algunas dolencias o lesiones.
¿Qué es la osteopatía?
La osteopatía es una disciplina de terapia manual que se basa en la manipulación de las estructuras del cuerpo, como los huesos, músculos y articulaciones, con el objetivo de mejorar su función y aliviar el dolor. La osteopatía se suele desplegar en cuatro grandes ramas:
Osteopatía estructural
Se centra en el tratamiento de trastornos musculoesqueléticos a través de manipulaciones articulares y estiramientos. Es eficaz para dolores y molestias de espalda o cuello y lesiones deportivas.
Osteopatía visceral
Trata las disfunciones de los órganos internos, basándose en la movilidad de los tejidos que los rodean. Ayuda a aliviar problemas digestivos, respiratorios y del suelo pélvico. También es útil para eliminar las adherencias postquirúrgicas.
Osteopatía craneal
Se centra en la manipulación suave del cráneo y las estructuras relacionadas con el sistema nervioso central. Es útil para tratar dolores de cabeza, migrañas, bruxismo, mareos y alteraciones neurológicas, promoviendo la circulación y reduciendo tensiones.
Osteopatía pediátrica
Ayuda a corregir problemas posturales, digestivos, dificultades respiratorias y trastornos musculoesqueléticos en niños y bebés, utilizando técnicas suaves y seguras. Se encuentra ampliamente extendida para el tratamiento de cólicos del lactante, estreñimientos y reflujos.
¿Qué es la fisioterapia?
La fisioterapia es una disciplina sanitaria que se enfoca en la prevención, tratamiento y rehabilitación de lesiones o enfermedades mediante diferentes técnicas, como terapia manual, ejercicios terapéuticos o radiofrecuencia.
El objetivo de la fisioterapia es restaurar la movilidad, aliviar el dolor y optimizar la funcionalidad general del paciente, facilitando el proceso de recuperación y mejorando su calidad de vida.
Diferencias entre la fisioterapia y la osteopatía
Regulación: Una de las diferencias más importantes entre fisioterapia y osteopatía tiene que ver con la regulación de estas profesiones.
En España, la fisioterapia está completamente reglada. Los fisioterapeutas deben disponer de un título universitario oficial y, en algunas comunidades autónomas, como Madrid, deben estar colegiados en el Colegio Profesional de Fisioterapeutas para poder ejercer su profesión. Esto garantiza que los profesionales cumplan con los estándares de formación y práctica establecidos por las autoridades sanitarias.
Por el contrario, la osteopatía no se encuentra regulada, no existiendo garantías o respaldo oficial para la práctica y desempeño de esta profesión. Esto no significa que no haya excelentes osteópatas que ayuden a recuperarse de dolencias o mejoren la calidad de vida de las personas, sino que la normativa en esta disciplina es mucho más laxa que en la fisioterapia y su respaldo legal inexistente.
Enfoque: La fisioterapia se encarga de tratar afecciones musculoesqueléticas agudas o crónicas, lesiones deportivas, problemas postquirúrgicos y neurológicos. La osteopatía, además de tratar dolencias musculoesqueléticas, aborda trastornos crónicos, desequilibrios posturales y problemas del sistema visceral.
Técnicas utilizadas: La fisioterapia se centra en la rehabilitación, utilizando terapia manual, ejercicios terapéuticos, técnicas invasivas, estiramientos y aparatología, entre otras. La osteopatía, sin embargo, busca restaurar el equilibrio empleando exclusivamente para ello técnicas manuales y manipulativas.
Formación: En España, los fisioterapeutas tienen formación universitaria en fisioterapia. Para ser osteópata, en cambio, no es necesario obtener ningún título oficial y, por tanto, su formación es más dispar; muchos son fisioterapeutas con formación adicional en osteopatía, pero otros no disponen de ningún título reconocido en la rama de ciencias de la salud.
Además, al no estar regulada la formación en osteopatía, las acciones formativas son muy desiguales, tanto en duración como en contenidos, existiendo desde cursillos de pocos días a másteres de cinco años.
En EstudioFisio todos los osteópatas son también fisioterapeutas titulados y colegiados, lo que garantiza un enfoque sanitario completo y multidisciplinar. Todos ellos han cursado másteres impartidos por universidades de referencia, como la Universidad de Alcalá (UAH), y centros de reconocido prestigio que orientan sus titulaciones a profesionales sanitarios, más específicamente a Diplomados o Grado en Fisioterapia, como la Formación Belga Española de Osteopatía (FBEO) y la Escuela de Osteopatía de Madrid (EOM).
Condiciones y patologías más comunes tratadas
- Osteopatía: La osteopatía trata dolores musculoesqueléticos, disfunciones posturales y problemas viscerales como trastornos digestivos o respiratorios.
- Fisioterapia: La fisioterapia es clave en la rehabilitación tras cirugías o lesiones deportivas, además de tratar problemas neurológicos, respiratorios y musculares.
- Áreas de solapamiento: Ambas disciplinas pueden complementarse en el tratamiento de dolores musculoesqueléticos crónicos, como los de espalda o cuello, así como para el alivio de molestias asociadas a malas posturas, movimientos repetitivos y otros factores.
¿Cuál elegir y cuándo combinar ambas disciplinas?
La fisioterapia goza de mayor reconocimiento, se encuentra totalmente regulada por la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias y avalada por la evidencia científica, por lo que debería prevalecer siempre sobre otras disciplinas para tratar problemas de salud.
No obstante, muchos osteópatas adquieren pericia en técnicas manipulativas y enriquecen su visión, enfoque y abordaje de patologías gracias a la formación y desarrollo de esta profesión.
En muchos casos, la combinación de ambas terapias puede ofrecer excelentes resultados, sobre todo si los fisioterapeutas disponen también de formación en osteopatía. Es decir, sobre la base de la fisioterapia, adquirir nuevos elementos de la osteopatía.
Preguntas frecuentes (FAQs)
¿Se puede recurrir a ambas terapias a la vez?
Sí, la combinación de fisioterapia y osteopatía puede ser muy beneficiosa, aunque recomendamos que las técnicas osteopáticas las ejecuten profesionales sanitarios que dispongan de una titulación oficial, como los fisioterapeutas.
¿Están reguladas estas profesiones en todos los países?
En España, la fisioterapia está completamente regulada, no así la osteopatía (al menos no de forma oficial). Sin embargo, en países como el Reino Unido, Estados Unidos, Australia, Canadá y Francia, la osteopatía dispone de mayor regulación y, en algunos de ellos, goza de cierto reconocimiento sanitario.
Conclusión
Aunque la osteopatía y la fisioterapia comparten el objetivo de aliviar el dolor y mejorar la movilidad y salud de las personas, se diferencian en aspectos clave, como su regulación, enfoque, formación y técnicas empleadas.
Fisioterapia y osteopatía pueden llegar a complementarse en según qué circunstancias, especialmente cuando son practicadas por profesionales con formación en ambas áreas.